Rutas por España

Sevilla: barrio de Santa Cruz

Barrio de Santa Cruz, en Sevilla

Sevilla es una ciudad con suficiente personalidad como para merecer una visita especial, dedicándole tiempo a recorrer sus distintos barrios. Hoy nos acercamos a uno de los más emblemáticos: el barrio de Santa Cruz, a pasos de los monumentos más importantes de la ciudad, como la catedral hispalense.

Paseando por el barrio de Santa Cruz

Aquí se ubicaba antaño la judería sevillana pero hoy sus calles son recorridas por los coches de caballos y los turistas de todo el mundo que vienen buscando su ambiente tradicional y típicamente andaluz. Casas blancas, ventanas enrejadas y patios floridos, laberinto de callejuelas sombreadas por naranjos.

Santa Cruz es además el corazón de la ruta de las tapas ya que aquí  conviven pintorescos bares con  tiendas de souvenirs y tablaos flamencos con algunos de los monumentos más importantes de la ciudad.

Estamos a un paso de los íconos de la ciudad: la catedral gótica se levanta sobre el solar que ocupaba la gran mezquita almohade, de la que subsiste, cristianizada en estilo renacentista, su alminar, la Giralda.

Calles del barrio de Santa Cruz

Frente a ella, los Reales Alcázares consisten en un complejo palaciego creado inicialmente por Pedro I el Cruel en 1364 sobre el antiguo alcázar de los almohades y después ampliado sucesivamente por los Reyes Católicos, el emperador Carlos V y Alfonso XIII.

El Archivo de Indias es la sede documental y testimonio de la historia de España en América a partir de 1785 por orden de Carlos III. Contiene 86 millones de manuscritos y 8.000 mapas, entre ellos algunos utilizados por Colón, Hernán Cortés y Cervantes.

La suntuosa Casa de Pilatos es actualmente propiedad de los duques de Medinaceli, mandada construir por el marqués de Tarifa, copiando la casa del pretor romano tras un viaje a Jerusalén. Otra versión dice que se debe su nombre a su ubicación en el lugar donde coincidía la estación del juicio de Pilatos en la procesión del Vía Crucis.

El Ayuntamiento se erige en una plaza con historia, la de San Francisco, donde la Inquisición  celebraba antaño los  autos de fe. Tiene dos fachadas, una plateresca del siglo XVI y otra neoclásica, fruto de una ampliación en 1891. En su interior podemos observar obras  de Velázquez, Zurbarán y Valdés Leal.

Éste no es sino uno de los muchos lugares que te recomendamos visitar en Sevilla. Hay tanto por ver en la ciudad, que dos días o tres se nos pueden hacer muy cortos en la capital andaluza.

Recomendamos que reserves un hotel en Sevilla que esté cerca de este barrio, sobre todo para aprovechar su vida nocturna: el verdadero pulso sevillano.